The Witchblade

“Yo estoy viva… y coleando… Yo soy la luz… yo soy el ángel de la muerte… yo soy el poder… esto es libertad… yo estoy… loca”.
      Sara Pezini, Witchblade #1

Durante el boom del comic de los años ochenta y noventa, varios artistas se separaron de las principales editoriales de comic de Estados Unidos para probar suerte por su cuenta. Grandes artistas de la talla de Rob Liefield (Youngblod para Extreme Studios), Jim Lee (Wild C.A.T.S. para Wildstorm), Todd McFarlane (Spawn para Todd McFarlane Productions) y Marc Silvestri (CyberForce para Top Cow) se unieron en una editorial que se conocería como Image, que procuraba escapar de la larga sombra de DC y Marvel, para poder publicar sus historias sin los problemas de derechos presentadas en ambas y tratar de ocupar parte de dicho mercado, que parecía inagotable e infinito para ese momento.
Para mediados de los noventa, Wildstorm Studios llevaba la delantera en publicación y en títulos dentro del esfuerzo de la editorial Image. Aún con buenas ventas, Top Cow Productions se encontraba en una posición de desventaja, debido a que su primer caballo de batalla Cyberforce no tenía el éxito esperado dentro del ámbito del comic. Acusada de plagio y falta de originalidad (el staff de personajes es muy similar a muchos de los X-Men de Marvel), la serie languidecía en ventas y apenas alcanzaba a impulsar a la editorial durante sus primeros años de existencia.
Como respuesta, en 1995 Marc Silvestri decidió darle un giro sobrenatural a su compañía. De la mano de Michael Turner, Witchblade vio la luz en noviembre de 1995. En su primera entrega (la cual fue reimpresa y de la cual tengo una de sus copias), la detective Sara Pezini se tropieza con su destino cuando por accidente, en un tiroteo de la mafia, ella llama al poder de un artefacto místico conocido como Witchblade, cuyos poder y facultades se integran a su vida, como su nuevo compañero de combate. Siendo una entidad masculina que lleva a cabo una relación simbiótica con su portadora, que sirve como regulador del bien contra el mal, integra (más de las veces en contra de su voluntad) a la atrevida detective a una serie de peligros y riesgos sobrenaturales; que la enfrentarán contra ángeles y demonios, empresarios corruptos y carismáticos secuaces, e incluso a la descendencia del mismo Jesucristo con María Magdalena
La serie fue un éxito más allá de los más salvajes sueños de sus creadores. The Darkness, que salió un año después, introdujo a uno de los primeros rivales de esta poderosa arma, así como cimento el camino de este estudio de artistas en uno de los más poderosos en el ambiente independiente. Con las Aventuras de Tomb Raider y otras producciones, esta se logró consolidar en el mercado americano, de donde sus contrapartes como Wildstorm han desaparecido o han luchado hasta el momento por sobrevivir.
El éxito de la serie motivó la creación de una serie de televisión, donde Yanci Butler (modelo que aparece con Jean-Claud Van Damme en Hard Target) interpreta a la detective Sara Pezini. Una serie con moderado éxito, fue cancelada a mediados del 2002 por la caída de los ratings y por el reingreso de la actriz a rehabilitación de su problema de alcoholismo.
Sin embargo, el más sorprendente de los golpes fue la adaptación de un anime. De estudios Gonzo, la historia del arma legendaria es contada desde la mano de Masane Amaha, una desobligada, desempleada y atribulada madre soltera de una niña de seis años, que fue encontrada en el punto cero de un evento catastrófico (terremoto) que destruyo Tokyo en un futuro cercano. Aunque la serie recurre a mucho de los estereotipos del anime (sólo vean el pecho de la protagonista y la armadura de la Witchblade arriba), ofrece un relato totalmente diferente al de la serie de comic (casi toda la trama se relaciona a las investigaciones  científicas llevadas a cabo sobre el artefacto) y con una animación intermedia; la historia es muy entretenida, con un final que va contra los convencionalismos de Hollywood. Para sorpresa de muchos de los fans, Top Cow ha declarado la serie canónica, lo que significa que este relato es parte de esta realidad.
Cuando se anuncia la puesta en escena en pantalla grande de esta historia (en espera desde el 2009 pero proyectada para el 2013), los fans esperamos que en algún momento de este paso. Porque, aunque no les gusten las mujeres que pateen traseros, Witchblade es una historia digna de ser vista, donde la fantasía sobrenatural se combina con el mundo moderno para ofrecernos una vista temible de todo lo que nos rodea. Por eso yo espero su realización, y rezando porque no ocurra el mismo desastre que provocó la cancelación de Red Sonya. Esto sería un gran honor para su primer dibujante, Michael Turner, que nos fue arrebatado por el cáncer en el 2008. Todos los fans de los comics estamos agradecidos porque hayas compartido tu talento. En su honor dedico este artículo.

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