Macross Plus

Macross Plus

Llega un momento en la vida de una persona en que cuando tiene una afición, la admite y la recibe con todas sus fuerzas. Al principio de mis veintes no era un gran aficionado del anime, me habían gustado varios de los animes que habían transmitido en la televisión nacional (era de los que corría para ver Caballeros del Zodiaco), pero jamás pensé que coleccionaría, recolectaría y atesoraría series. Después de todo, no existía la tecnología para verla, no tenía mucho dinero para comprar un VHS y era un estudiante de universidad (la absoluta pobreza). Pero todo eso cambio hacia principios del 2000. Mientras trabajaba en Paseo Colón, un buen día fui a El Lagar Desamparados y de camino en el bus me llamó la atención Animanía. En cuanto terminó mi jornada de trabajo me bajé allí y… bueno ahora comento por aquí en la sección otaku.

 

Luego de ver casi toda su videoteca y de contribuir a su formación (luego del accidente de lluvia), el gusto ya se había desarrollado y esporádicamente lo he alimentado durante todo el tiempo. Esto me permitió volverme a poner en contacto con Macross, una de las series preferidas de mi corazón. El problema es que por un error primero vi Macross Plus y luego vi Macross II. Después de un par de discusiones amistosas con Cristhian, me percaté de que algo raro había sucedido. Pero en ese tiempo todavía era demasiado inocente y demasiado ingenuo para comprenderlo. Como habían pasado de una maravillosa y poderosa historia de amor, a un bodrio vomitivo sin sentido donde ni siquiera se disparan. ¿Qué diablos fue lo que sucedió?

 

Lo que sucedió es que pusieron primero la carreta antes de los caballos. Debido a la distribución de derechos, tanto Studio Nue como Big West Advertising planeaban hacer un anime para celebrar el décimo aniversario de su aventura. Pero Big West se adelantó con Macross II, que sin la dirección de Shoji Kawamori ignoró la mayoría de las características que hizo grande esta serie (un triángulo amoroso, una diva cantante, una guerra intergaláctica y buena animación de combate). Obviamente todos consumieron el producto, todos se voltearon asqueados. Con una sonrisa desde las sombras Shoji Kawamori preparó su contraataque. Con la colaboración de Shinchiro Watanabe en la dirección, con la contribución de la oscura y desconocida compositora Yoko Kanno y la historia de Keiko Nobumoto, Macross Plus sale al público el 25 de agosto de 1994. Con un leve movimiento de mano, Shoji Kawamori hizo olvidar todo lo malo que había sucedido y nos introdujo de nuevo a la magia de su universo.
Inicio! Spoilers!
Fin! Spoilers!

 

¿Como se puede mejorar una fórmula ya existente? Shoji Kawamori responde con un grito nada tímido y descomunal. Dos triángulos amorosos, dos amigos que se desprecian, un amor que salió mal; todo en el marco de una guerra interestelar que es la base de las pruebas del YF-21 y YF-19, justo para el tiempo en que el prototipo del F-22 Raptor fue elegido como el diseño ganador para los cazas de quinta generación. Con personajes perfectamente definidos, una trama intrigante y envolvente, la lucha incesante contra la historia y el pasado; la imposición del amor por encima de todos los obstáculos con la Ciudad Macross de fondo vuelven a este OVA de cuatro episodios uno de los más extraordinarios logros de los últimos tiempos. La combinación de animación por computadora con animación tradicional, grandes batallas junto con un relato franco la convirtieron en un éxito en Japón, pero lo que siguió después jamás lo pudo haber esperado nadie en sus más locos sueños.

 

Si, porque en un intento de comercializar el éxito de la serie, la distribuidora Manga Entertainment la adjuntó a su paquete de estrenos durante su primer lanzamiento de animación japonesa en el occidente. Durante el primer lustro de la década de los noventa, esta casa comercializadora distribuye películas de la talla como Ghost in the Shell y Ninja Scroll, así como consigue los derechos de distrubución de Macross Plus y Neon Genesis Evangelion (por medio de ADV Films). Esto dio inicio al asalto de anime en occidente, que con el advenimiento de los medios de comunciación baratos (iniciando con IRC y continuando con los P2P) nos ha traído la ola de anime que nos sigue invadiendo hasta el momento. Esta obra es un puente, una obra que dio nacimiento a una tendencia y que en estos 20 años que nos acompaña nos sirve como punto de referencia para todo lo que tenemos ahora. Nada de esto existiría sin la contribución de esta serie, que elevó a Shoji Kawamori a la categoría de genio y que puso a todo su staff a la vista del público japones e internacional. Durante los siguientes años, cada integrante de este selecto grupo daría forma al anime moderno, de una forma o de otra. Eso es algo que no podemos dejar de lado, porque el que ignora la historia se arriesga a repetirla. Así que por su aniversario, salud.