[Evento] La Mole, celebrando sus 20 años al máximo

Las convenciones de anime/cómics/videojuegos son excelentes lugares para pasarla bien. A pesar de que de donde soy estas no eran grandes o se sentían algo limitadas, era agradable ir. Ahorita quiero platicar de la más reciente que experimenté, fue nada menos que La Mole, la mayor convención de cómics en México. La experiencia fue tan única que no pude evitar escribir sobre ella.

Para empezar debo decir que el staff fue muy agradable y educado. Anteriormente había escuchado sobre que llegaban a ser sangrones o groseros. En esta ocasión no había nadie así, o al menos no me encontré con ninguno. Todos eran bastante profesionales, te pedían y explicaban las cosas con tranquilidad, sin pretensiones. Este tipo de cosas puede llegar a distinguir a un evento de los demás, el buen trato a los visitantes siempre será bien recibido y debe ser una prioridad para cualquier organizador. 
El lugar, World Trade Center (WTC), era agradable por lo grande que es. No quiere decir que un evento de este tipo sea bueno solo por el espacio. Un lugar espacioso no solo ayuda a poner y organizar más stands, también evita que las personas se sientan abrumadas por sentirse apretadas. Esto es importante por la enorme cantidad de asistentes que estuvieron formados hasta por horas, ¿se imaginan el tener que esperar horas por un firma o skecth con mucha gente (no formada) alrededor nuestro yendo y viniendo? La ubicación es importante para convenciones de esta magnitud, por eso es una alegría decir que, en este caso, el lugar fue una excelente decisión.
A pesar de solo asistir el viernes, mi experiencia fue muy grata. Para comenzar, no fui solo, entre varios pagamos para irnos en una furgoneta, todo gracias a un amigo (eres grande Roly). Salimos con media hora de retraso, no es mucho tiempo pero algunos querían un autógrafo de David Finch así que los minutos eran cruciales. Al inicio, el viaje fue bastante fluido y relajado… hasta llegar a la Ciudad de México, donde el trafico nos hizo replantearnos si caminar era buena idea. Cuando llegamos al WTC no sabíamos ni por donde entrar, hoy en día seguiríamos dando vueltas por el lugar si no hubiera preguntado donde era la convención. Nos paramos frente a la entrada una hora antes de que empezara, ya habían varios formados desde quién sabe qué hora. En ese momento empecé a molestarme porque pensé que no había diferencia al llegar más temprano… entonces pasaron 45 minutos y apareció la verdadera fila.

¿Ven ese cartel de Harley Quinn? Pues estaba un poco más adelante

Al dar las once en punto se empezó a sentir la emoción de la gente. Todos se preparaban para correr hacia el stand de sus artistas preferidos y ser los primeros en tener su cómic firmado, los otros simplemente querían ver las tiendas. Yo no sabía que buscar, tenía idea de todo lo que habría pero con dinero limitado y tantas cosas en venta llegué a sentirme abrumado por todo. Al abrir empezaron a ingresar lo más ordenado posible, varios, tan pronto pusieron un pie dentro, rompieron la barrera del sonido para llegar al fondo del lugar, donde estaban los dibujantes. A pesar de no saber qué comprar o buscar me uní a esa carrera para conseguir un skecth de Gerardo Sandoval para un amigo. La Mole había comenzado y todavía tenía un largo día por delante.

Al principio tuve suerte pues no había fila para ver a Gerardo Sandoval. Espere un rato en lo que se preparaba, mientras empecé a hablar con el encargado de estar al lado de su puesto, no pregunté su nombre pero era un sujeto bastante amable explicándome los sucesos más importantes del evento. Como el enorme stand de Xbox, la visita de Blue Demon Jr, los 4 Geeks y la zona de juegos de Civil War. Fue entonces que Sandoval terminó de prepararse para empezar a recibir comisiones, fui el primero en pasar, pedí un skecth de torso a tinta de Rorschach. Mientras lo hacía empecé a sacarle plática pero de entre todo lo que me dijo una cosa se me quedó grabada, su repuesta a mi pregunta:

Yo: “¿Qué es lo más raro que te han pedido dibujar?
Gerardo Sandoval: “Una persona me pidió dibujarlo con la ropa de Stan Lee y al lado Spiderman y una chica me pidió un pollo
Yo: “¿Qué?
Gerardo Sandoval: “la chica me dijo que le gustaban los pollos, incluso me mostró su libreta y habían muchos pollos.

Cuando terminó le di las gracias, le avisé a mi amigo que ya había terminado y empecé a caminar sin rumbo fijo.

Batimovil de 1960

Llegué a ver varios stands interesantes, el primero fue Logos Rockers. Aquí vendían posters, cuadros o fotografías, todo firmado por los actores, escritores, jugdores, etc. A decir verdad, muchas me interesaron pero por obvias razones hasta tomar fotos me daba miedo, todo costaba un ojo de la cara. No voy a decir que los precios eran super exagerados pero para un estudiante era mejor no respirar cerca. La tienda tiene los certificados de autenticidad así que si tienes para gastar no creo que tengas problemas con ellos. En cuanto a mi, hubieron varios que deseaba tener en mi poder y presumirlos, algún día, cuando sea rico, tendré todos los que quiera.

 Adivinen dónde está la firma de Todd Mcfarlane

Aprovechando que renació la fiebre de Star Wars, había un stand bastante curioso. No vendían nada (eso era el trabajo de los otros) solo tenían un par de interesantes actividades. En una podías conducir un mini BB-8 para competir contra alguien que controla a otro, lo gracioso era ver los problemas que la gente tenía por no poder controlarlos, nunca vi alguna sin dificultades. La otra consistía en una campo de entrenamiento de la rebelión donde debías derribar 10 objetivos en menos de un minuto. Por desgracia, no probé ninguno de los dos, la carrera porque lo pospuse demasiado y la practica de tiro siempre tuvo una fila bastante larga, no sabía si tardaría pero no quería hacer fila por un tiempo indefinido. Se veían entretenidos y si siempre hubo gente formada entonces no creo que hayan sido malas experiencias, ver a los BB-8 perder la cabeza no tuvo precio.

Hubieron dos puestos más que proponían juegos a sus participantes, Civil War y Xbox. El primero se trataba de una serie de juegos simples como correr en una caminadora, atravesar varias cuerdas en forma de telaraña, entre otras cosas. Eran divertidos de ver y, por la sonrisa de la gente, también de hacer (maldigo mi desvelo de tres días por no permitirme participar). Xbox lo hizo más simple, puso varias consolas con demos de sus exclusivas o de juegos populares, como FIFA y Gears of War, agradezco eso porque por fin pude probar Killer Instinct, puede parecer simple a primera vista pero tiene su encanto en el mundo de los juegos de pelea. Dijeron que tendrían el Quantum Break, pero aunque me pasé varias veces en distintos momentos, nunca lo vi disponible, quizá no le atiné a la hora o día. Estaban perfectos para distraerte, tanto viendo como jugando y probar alguno que te interese.

Un invitado especial que llegó fue Blue Demon Jr. Lo bueno es que podías tomarte una foto con este luchador mexicano totalmente gratis, si la querías impresa ya te costaba. Al lado estaba la organización: Dr Sonrisas, sus acciones son cambiar la tristeza de los niños y jóvenes con diferentes acciones como conocer a sus ídolos. Si dabas una donación te regalaban una nariz de payaso y un Artbook de Blue Demon Jr. bastante coqueto, con arte de diversas personas que visitaban La Mole, para que ahí mismo te lo firmaran. Fue un bonito detalle traer al luchador junto con la presencia de la fundación para presentarte voluntario, si les interesó pueden entrar a su pagina dando click aquí.

Ignoren mi cara, sí estaba emocionado solo que, como he dicho, estaba muy cansado

A pesar de la gran cantidad de stands hubieron dos que personalmente me gustaron mucho, fueron los de Kamite y Panini. Al ser editoriales que publican cómic y manga en México, quería ver la organización de todo. En el de la editorial mexicana estaba excelentemente adornado, con cosplayers, adornos de Hora de Aventura y pequeñas estatuas de personajes de sus títulos. En cuanto a producto estaba bien surtido con todos los números de sus publicaciones, a pesar de tener una distribución cuestionable se ve que les va bien, esperemos que sigan así. En cuanto a la otra, tenían de invitada a la cosplayer Rosa, quien en ese día usaba un excelente cosplay de Boa Hancock. Tenía su inmensa cantidad de publicaciones desde el primer número, parecía un espacio pequeño dando al mismo tiempo una impresión de estar más surtida pues llenaba dos pisos. Ambas eran una oportunidad para conseguir algún número atrasado o para iniciar a coleccionar una nueva serie. Se nota que el cómic y manga llegaron para quedarse, benditas sean esas dos editoriales.

Aunque lo que más me gustó de toda la convención fueron los proyectos mexicanos. Ver a todos esos artistas y escritores deseando poder salir adelante, autopublicando sus obras usando este hermoso medio llamado internet, te llena de esperanza sobre el futuro de la industria en México. Algunos con trabajos bastante interesantes, solo necesitan que las personas los tomen en cuenta, no solo para sobresalir sino también para mejorar. Para todos los que desean sacar su propio cómic o manga, no deben decepcionarse por parecer algo imposible, ellos son el ejemplo de las posibilidades que todos tenemos. Visitarlos, hablar con ellos y comprarles, será mi objetivo de ahora en adelante al ir a una convención, para que sepan que si hay gente interesada, que su lucha no es en vano. Al platicar con ellos muchos fueron muy amistosos, si pueden pasen con ellos y hojeen lo que tengan no duden que se llevaran alguna sorpresa. De este tema quisiera hablar más profundamente, esperen ver un artículo hablando sobre ellos y mencionando a muchos de los que fueron, próximamente.

Para terminar de narrar mi experiencia contaré la última sorpresa que tuve. Estaba dando una última vuelta por el lugar, faltaba media hora para irme, tenía los pies hinchados, el cansancio estaba ganando la batalla, con el estomago lleno el mal del puerco (comes te da sueño, duermes te da hambre) no ayudaba, el pensar en dormir durante todo el camino de regreso era bastante tentador y ya había gastado lo necesario para no quedarme completamente pobre. Decidí darme otra vuelta por el stand de Kamite, el cual no había visto a detalle, aparte era el que me quedaba más cerca. Caminé de la forma más tranquila posible, sentía que podría gastar más  energía de la que tenía, al llegar me di cuenta de algo raro, había una escalera en un costado. No me sentía con ganas de subir y tampoco de gastar en lo que vendieran arriba pero mi curiosidad era grande, por flojera le pregunte a una de las personas que atendía:

Yo: “Disculpe, qué ahí arriba
Encargado: “Está Terry Moore dando autógrafos
Yo: “¿Qué?
Encargado: “Si, Terry Moore está arriba dando autógrafos

En ese instante me llegó un ataque de adrenalina, el cansancio se fue, mi mente se nubló para dejar una sola idea en mi cabeza: “Terry Moore, esta dando autógrafos“. Podía conocer en persona al escritor y dibujante de Rachel Rising, Echo y Strangers in Paradise, y por lo que podía ver no había ningún tipo de fila. Rápidamente busqué algún cómic para que me firmara, si hubiera tenido el dinero hubiera comprado el primer tomo de Strangers in Paradise pero al final elegí comprar, de nuevo, el primer número de Rachel Rising, los que atendían incluso me animaban a apurarme, lo cual no ayudó a mi desesperación. Subí intentando calmarme un poco, al llegar estaba sentado platicando con los miembros del staff de Kamite, al acercarme agradecí saber el ingles suficiente para poder hablar con él sin ayuda de la traductora. Es una persona muy agradable y buena onda, firmó el cómic, bromeamos un poco, nos tomamos una foto, le pregunté sobre Echo:

(Traducido del ingles)
Yo: “¿tuviste que aprender algo para escribir Echo? es que sí me creí lo que escribiste
Terry Moore: “Mira” -puso el pulgar e indice estirados horizontalmente frente a él, con poco espacio de separación- “esto es lo que sé de ciencia” -separó ambos dedos dejando un gran espacio entre ellos- “esto es todo lo que escribí

No se nota mi emoción

Es hermoso

Conocerlo fue la forma perfecta de terminar mi primera visita a La Mole, fue la cereza sobre el pastel. Al reunirme con mis acompañantes y subirnos a la furgoneta no podía estar tranquilo, repetía a cada rato que conseguí el autógrafo de Terry Moore, no me lo podía creer.

Para terminar puedo decir que siendo mi primera visita fue completamente satisfactoria. No hubo nada negativo más allá de mi cansancio por desvelarme varios días pero eso no me impidió disfrutar de todo lo que ofrecían. Si pueden ir alguna vez no duden en hacerlo, es una experiencia que todo aquel con gustos frikis debe tener por lo menos una vez.

Esto es solo una pequeña muestra de todo lo que vendían

Si quieren ver los cosplays de evento pueden hacerlo dando click aquí.
  • Yo fui a la mole hace muchos años y veo que ha evolucionado positivamente, me hubiera gustado ir a esta edición pero la economía no ayudo mucho y solo espero que no hayas hecho fila para ver a Navy.

    Saludos.

    • jajajajajajaja solo para Paola del Castillo XD