Neoverso

MS Igloo fue un noble experimento que resultó de cierta forma “exitoso”.

Por una parte sirvió para revivir viejos proyectos y hacer un recuento del Universo UC a través de los ojos de los soldados del común de Zeon.

Este se aprovechó de elementos históricos propios del universo así como de la vida cotidiana en nuestro planeta en tiempos de guerra tales como el uso de niños como soldados, el uso de elementos turbios para propaganda y la misma incapacidad de los medios de productor masiva de formular una respuesta ante ciertos agujeros tecnológicos inevitables en la experiencia de la guerra.

Porque algo malo que siempre va a estar relacionado con una guerra es el famoso SNAFU (Situation Normal: All Fucked Up).

De esta forma, al final de MS Igloo uno queda con la sensación de que la guerra ha terminado pero la vida continúa, con sus protagonistas intactos pero con una sensación de pérdida por la derrota sufrida. No fue justo, pero esa fue la decisión de Yoshiyuki Tomino, la victoria de la Federación en su primera guerra.

El problema fue lo poco que se habló del frente de gravedad. La lucha en la tierra fue intensa, brutal y despiadada; donde tanto el Principado como la Federación dejaron de lado las delicadezas de su entorno y se enfrascaron en una reyerta que le costó a la humanidad millones.

Respondiendo a esta necesidad, en el 2008 Takashi Imanishi y su equipo recibieron luz verde para continuar el proyecto que habían comenzado casi un lustro atrás.

Con Asahide Okuma e Iroshi Onogi encargados de la historia; MS Igloo 2: In the Gravity Front sale al mercado el 24 de octubre del 2008 para venta directa. Lo más irónico de todo es que el personaje que une todas las historias no existe racionalmente.

La historia de MS Igloo pasa a la Federación y al planeta Tierra. Durante el inicio del lanzamiento orbital de tropas de Zion a la Tierra, llega una Shinigami que apoya al principado, que busca el alma de gente de la Federación digna de su atención.

De primera vista ella se fija en el teniente Ben Barberry, un extraordinario oficial afortunado de infantería especializado en el derribo de Zakus que tiene la mala fortuna de ser el único que queda en el campo de combate. Como las fuerzas federales retrocediendo en todos los frentes, el Mayor Michael Colmatta le ordena a su equipo que avance y retrase lo más posible a un equipo de tres Zakus que avanzan en su dirección.

De acuerdo a su experiencia, el tienente Banberry prepara la emboscada, pero esta falla debido a que uno de los equipos dispara antes de tiempo. A pesar de la información de inteligencia, dos Zakus son los que atacan su posición. A duras penas el equipo logra derribar uno, pero su compañero destruye al equipo del teniente. Lamentablemente, este cae en un pozo de una mina, lo que aprovecha el teniente para destruirlo. Cuando creer que es de nuevo el único en sobrevivir, el tercer Zaku aparece de la nada. Sabiendo que todo esta perdido, el teniente saca su arma de mano y le dispara al gigantesco Mobile Suit antes de morir.

Conforme las fuerzas de la Federación retroceden hacia el Canal de la Mancha, la shinigami pone su atención en el teniente Yamon Handell. Como un amargado, desgastado y mutilado sobreviviente de un enfrentamiento contra un comandante conocido como el “Ogro Blanco”, sus compañeros pilotos han muerto o han enloquecido debido a su cercanía con la muerte.

Después del fracaso de la operación para detener a los zakus, el Mayor Colmatta arma un equipo especial en torno al teniente para atacar por sorpresa a los elementos del principado. Haciendo uso de los tanques incendiados, el equipo del teniente logra destruir dos zakus y al final este con un engaño remata a su pesadilla. Pero cuando celebra el derribo, un equipo de infantería motorizada de Zeon lo mata en su tanque. El único sobreviviente es el sargento Rayban Surat, su piloto y otro que ha presenciado a la Shinigami.

Por último, la Shinigami ha puesto los ojos en la teniente Arleen Nazon. Ella era parte de un equipo de desarrollo del modelo RTX-440 Guntank, un masivo mobile armor diseñado para mobilidad y alto desempeño en el campo de combate. Lamentablemente, su amante y compañero de proyecto Clyde Bettany defectó a Zeon, lo que provocó que la Federación cancelara el proyecto y la recluyera de por vida en prisión.

Desesperada, ella hace un pacto con la Shinigami, por lo que recibe una segunda oportunidad durante la Batalla de Odessa, donde a cambio de su colaboración ella y un grupo de condenados recibirían el perdón. Debido a las enormes pérdidas que ha sufrido en 44° Brigada Híbrida Mecanizada, el Mayor Colmatta le ordena destruir la nave de artillería móvil Dadube. Los Guntank hacen valer su condición en el campo, y aunque pierde a dos de sus hombres el Dabude queda destruido. Pero un ataque resagado de artillería le hace ver que queda otro Dabude en el campo de combate.

A pesar de la orden del Mayor Colmatta de no atacar el segundo Dabude, ella se lanza con todo en su contra. Sin importar los Zakus o los tanques que se ponen al frente, ella barre con la resistencia y a pesar de quedar gravemente dañada queda ubicada frente al Dabude. De inmediato recibe una transmisión de radio de su amante Clyde Bettany.

Este se alegra de saber que se encuentra con vida y se disculpa por todo el daño que le ha provocado en su vida. Lamentablemente, Arleen está furiosa con la revelación y activa el sistema de autodestrucción de su Guntank, llevándose a su traidor amante consigo. Cuando su alma despierta, la Shinigami le dice la verdad. Su amante era un doble agente de la Federación que espiaba a Zion. Mientras su alma desaparece del campo de combate, la Shinigami se lamenta de que se ha acabado su diversión en el planeta y debe volver al espacio para buscar a sus siguientes elegidos.

La segunda parte de MS Igloo viene como una gran mejora y corrección de los numerosos problemas que poseía la primera parte. La exageración de los gestos de los humanos al enfrentarlos a situaciones extremas usando elementos del teatro kabuki fue dejado de lado a excepción de la Shinagami. Si, porque usar a una Shinigami que apoye a Zeon fue un elemento inmisericorde que nos recuerda que la guerra es hermosa y letal.

Dentro de su exhuberancia letal (que me recordó mucho a Cima Garahau, uno de los villanos más imponentes de la saga), la diosa selecciona a sus víctimas en la Federación; las que lleva a hacer su trabajo.

Esto combinado con la surealidad de la guerra pone los elementos uno contra otro y nos deja una obra que se aprovecha de los elementos para unir una trama digna de Mobile Suit Gundam, la guerra sin sentido, el odio sin razón y la muerte como única expresión del desastre.

Lamentablemente, el éxito no vino con la misma intensidad para esta obra y el proyecto simplemente falleció junto con el inicio de la primera década del siglo XXI. Pero lo que nos dejó MS Igloo es una forma diferente de contar la misma historia antiguerra que se nos ha venido contando en esta historia.

Además de esto, la inversión en efectos especiales y el éxito en ventas llevó a la Sunrise a revaluar su forma de negocios. De esta forma, si un escritor poseía una historia podía transformarse en productor y renunciar a los productores de televisor, podría hacer su obra para la distribución directa y esperar unas ganancias sustanciales (aunque no al nivel de la inversión de un proyecto por televisión).

Esto marcó el ejemplo para Gundam Unicorn, con el que se esperaba desarrollar una exitosa novela sin la intervención de los mandamases de la televisión. Su éxito ha redefinido la forma de relatar el universo UC, un universo SIN Tomino, un universo de reecuento. Este sería uno de los más emotivos homenajes para la franquicia más exitosa del anime de Japón en su 35 aniversario.

Por esto siempre es bueno tener presente la historia, porque el éxito no viene milagrosamente, se consigue con tiempo, inversión y a veces grandes dosis de prueba y error. Esta es la base del éxito para todos y siempre hay que tenerlo presente.