CROSS ANGE (2014)

Chicas al mando de mechas

Los pequeños matices los que hacen la diferencia entre una serie que habla de lo mismo y una que innova lo ya conocido. Esta fue la imagen que me dejó Cross Ange: Tenshi to Ryū no Rondo, que mezcla un poco del clásico estilo mecha (con un matiz distinto y algo superficial) con el atractivo y moderno estilo ecchi; con una historia peculiar e interesante y una serie de seductores e interesantes personajes.

Ahora, generalmente cuando veo una serie ecchi llena de chicas en trajes reveladores pienso que no será nada interesante o fuera de lo esperado, sólo será un montón de oppai saltando de aquí a allá y escenas calientes sin mucha profundidad; sin embargo, la mezcla de yuri, ecchi, mecha y hasta un poco de romance con una buena historia (que personalmente me agradó mucho) le da a esta serie una trama cautivadora, que incita no sólo a sentir interés por las voluptuosas y curvilíneas protagonistas, sino por el cómo la historia se desenlaza y cómo se va tejiendo una trama fantasiosa e inteligente.

Las Norma

 

En el universo de la serie -que luego se vuelve un multiverso-, los humanos han llegado a lograr una aparente utopía, forjada por aquellos individuos capaces de utilizar mana, una especie de energía vital que permite a los humanos extender sus sentidos más allá de lo físicamente posible. Por el contrario, las Norma, cuya única diferencia con los humanos es su imposibilidad de utilizar mana, situación especial que solo afecta a las mujeres, por lo que todas y cada una de las Norma son chicas. Para la raza humana, el mana se toma como la fuerza vital que provee sabiduría, civilización e inteligencia; bajo esta premisa, las Norma son categorizadas como animales violentos y peligrosos, que deben ser aislados como criminales, por el simple pecado de haber nacido sin esta habilidad.

Los Dragon

 

Como resultado de su personalidad salvaje y poco civilizada, las Norma son enviadas a una lejana isla llamada Arzenal donde viven para cumplir un único objetivo: combatir y matar a los dragon, criaturas de distintos tamaños y formas que aparecen en un tipo agujeros dimensionales; es decir, el trabajo de las Norma es morir protegiendo a los humanos que tanto las desprecian. Los dragon más grandes poseen habilidades especiales que los convierten en seres realmente peligrosos, lanzar rayos que incineran todo a su paso, controlar la gravedad a su alrededor y protegerse a sí mismos con escudos de energía son algunas de esas habilidades.

La batalla contra los Dragon no es del todo trabajo forzoso: cada batalla y cada tipo de dragon tiene un valor económico y por lo tanto, las chicas son pagadas de acuerdo a la cantidad y calidad de criaturas que han eliminado. Éste dinero lo pueden utilizar para cualquier cosa que deseen, siempre y cuando no esté más allá del límite de la isla.

Arzenal: la isla harem

La isla cuartel donde viven las Norma las confina de toda relación con el exterior; además, como no existe presencia masculina dentro de este mundo, estas chicas se ven obligadas a liberar sus deseos con sus compañeras, lo que convierte a este pequeño trozo de tierra en un enorme harem de chicas calientes con nada más que chicas para desahogarse. Además, como las Norma son prácticamente objetos, aquellas con dinero suficiente pueden comprar a otras chicas y poseerlas como su juguete viviente, además de darse algunos lujos como una habitación pomposa, alimentos finos y armas para sus Para-mail.

La princesa vergonzosa

La protagonista de nuestra serie, Angelise Ikaruga Misurugi, nació en una familia de la más alta clase, para ser más específico, en la familia real Misurugi; que tiene a su cargo una ciudad completa y una enorme fortuna y fama. A los 15 años de edad, como princesa de la familia debe pasar por el proceso de coronación, una especie de ritual que la convierte en mujer adulta, capaz de reinar y de tener voto en cualquier decisión referente a la familia real. Mientras se realizaba ese ritual, se descubre que la amada princesa es una Norma.

Envuelta en una serie de trágicos eventos, la revelación de nuestra princesa llega a convertirse en el desencadenante del mayor cambio en su vida; es condenada y enviada a Arzenal, donde se ve obligada a adaptarse y dejar atrás su lujosa vida para llevar una al estilo “matar o morir“. En ese lugar se ve obligada a cambiar por completo su forma de vida y su actitud para con las personas, siendo objeto de continuas agresiones y limitaciones; primero, la humillan con un examen corporal que nunca hubiese imaginado, luego, reducen su nombre a Ange, además, la obligan a vestir de cierta forma (una bastante reveladora por cierto) para poder operar su máquina asignada; todo esto como el giro de 360 grados que su vida daría.

Los Para-mail

Las armas que utilizan las chicas de nuestra serie se llaman Para-mail, una especie de aeronave de guerra que puede cambiar de forma a una más al estilo mecha, un robot antropomorfo cargado de armas y tecnología de punta. El origen de estas naves es del todo impresionante, explicado conforme se desarrolla la serie y que responde muchísimas preguntas que surgen al inicio.

Aunque los Para-mail son básicamente robots de guerra, existe uno de ellos que es especial, el Villkiss, conducido por nuestra princesa desterrada. Villkiss posee habilidades especiales que le hacen superior a cualquier otro de su tipo; sin embargo, ninguna chica ha logrado conducirlo de forma exitosa; esto hasta que la desdichada Ange es asignada a esta nave.

Cuando se aclara la historia detrás de los Para-mail; más importante aún, del Villkiss, se da origen a un giro inesperado en la trama que da comienzo al clímax de toda la serie, lleno de eventos emocionantes y luchas inesperadas.

Mi opinión

Cuando comienzo una serie con una buena dosis de “trama“, me predispongo a pensar: “una serie donde sólo se verá pechos con una historia obvia y predecible girando alrededor de los atributos corporales de las chicas… Nada interesante…”. Sin embargo, contrario a lo que esperaba, esta serie me logró enganchar con su historia; que desde el primer capítulo deja ese sentimiento de “¿y ahora qué?” que te hace continuar con el capítulo siguiente y el siguiente sin cansancio.

La calidad de la animación es impecable, con algunos efectos computarizados que no opacan la animación en general y una excelente fluidez en los movimientos de cada elemento. En general le daría 10 puntos de 10 al tema animación.

Por último, el desarrollo de la trama me deja un buen sabor; en realidad me impresionó y me dio más de lo que esperaba, con una serie de sucesos emocionantes y un buen balance entre una historia bien pensada y un buen nivel de ecchi. Sin duda merecedora de un lugar en el “top 10” de las mejores series de su temporada.