Idol Project

Idolos con otros nombres y FORMATOS

Yo pensaba que el fenómeno Idol era ajeno a Latinoamerica, ni que hablar a Costa Rica. Ante todo para que un proyecto de ídolos prefabricados tenga éxito se requiere un público recepitvo que siga las vicisitudes de un grupo de “personas modelo” mientras tratan de exponer su arte, muchas veces de la forma más plástica posible. Pero después de ver a mi madre, dos días de sufrir una dolorosa lesión en la cadera operada, sentada frente al televisor de la cocina en una silla de ruedas viendo sin falta la siguiente edición de “Tu Cara Me Suena” de Canal 7, uno tiene que admitir que el fenómeno de ídolos prefabricadas ha existido desde que se le brindó valor comercial a la caja idiota. Y mientras sus órdenes y gritos por moverla mal resuenan en mi cabeza, se acrecienta en mi el odio y la gratitud que siento hacia ese maldito formato que puede hacer que una persona olvide su dolor por dos horas.
En Japón, el fenómeno de las ídolos nació en los setenta, cuando varias agencias de publicidad y de talentos comenzaron a formar adolescentes para que robaran el escenario e hicieran millones para ellos. Esta forma de talento prefabricado llegó a su apogeo con la popularidad del pop en los 80 (lo que permitió la combinación de sintetizador, efectos de sonido y mezcla para esconder lo que el talento no pudo proveer) y este continúa a través de numerosas metamorfosis que tienen sólo algo en común, serán contadas las ídolos de la actualidad que puedan conservar su popularidad en el tiempo.
Una de las pocas cosas interesantes del esfuerzo de TELETICA FORMATOS en esta temporada de este reality es el cruce de géneros. Melissa Mora se ve muy atlética y varonil. Pff!
Pero durante los años 90, cuando iniciaba el boom de animación gracias a los avances en almacenamiento y transferencia de datos; a algún ingenio creativo se le ocurrió combinar idolos con anime (no por primera vez). Con el apoyo de la agencia de scouts Aoni Production, Studio Ox (Burn Up W) decidió incursionar por primera vez en el lucrativo mercado, donde el objetivo del relato no era la historia en si, sino las voces famosas que conformaban la historia. De esta forma, Idol Project abortó a la historia.

Ficha Técnica

Idol Project

Director: Yasushika Nagaoka
Producida por: Studio OX
Liberada en 1995

Inicio! Spoilers!

Mimu Emilton es una simpática y atolondrada adolescente con un sueño en la vida, ser como la presidenta del mundo, la bien amada idol Yuri. Ella pretende participar en la Octava Presentación de Idolos en la ciudad de Starland. Pero lamentablemente en su camino se tropieza con las sucesoras de Yuri, las 6 Idolos supremas. Primero se tropieza con la actriz infantil Rukka Esenpolka (la idolo más joven cuyo moto Sonrisa) para impactar con Corvette Hiyards (amante del jabón y de toquetear a la gente, su moto es Ritmo). Luego queda inmiscuida en una guerra de bandas entre Layla B. Simmons (la ídolo roquera cuyo moto es Agallas) y Extra Kaidou (la ídolo clásica cuyo moto es Dignidad). Ella es rescatada por Palpu Rangrang (la ídolo luchadora cuyo moto es Relajación) y al final llega a la audición con ayuda de Shion (la ídolo ninja, cuyo moto es Espíritu). Con su ayuda ella logra llegar a la audición pero cuando va a presentar su canción es secuestrada junto con las ídolos por monstruos desconocidos.

Ojo! Spoilers!

Estos monstruos trabajan bajo las órdenes Mr. Bananaan, el propietario de la Dimensión Tropical de Bali. Cada año el sol se pone en el complejo y se debe hacer una competencia de ídolos para recuperar al Sol. Todas participan en la contienda en equipos de dos, al final solo quedan Layla y Extra; pero debido a cuestiones de fuerza mayor (una babosa en el culo de Extra) Mimu debe relevar a Extra y pelear con Layla para intentar sacar el sol. Cuando todo parece perdido (una ballena destruye el cuerno), Mimu canta la canción de Yuri para recuperar el Sol. Para la consternación de la joven el Sr. Bananaan proclama a Yuri la ganadora por segunda vez consecutiva.

Ojo! Spoilers!

Todas quedan atrapadas en el complejo. Para poder conseguir dinero, Mimu trabaja en un local de comida rápida en un sitio que sufre de repetidos ataques de robots gigantes, criaturas inmensas y otros horrores. Lamentablemente, una dimensión comienza a absorber todos los sistemas, incluyendo a Bali Hawaii y la Tierra. Dentro de esta dimensión todos son convertidos irremediablemente en Yuris. Para evitar este destino, las ídolos intentan la adaptación de una obra (Caperucita Roja) sin éxito. Abrumada por la poca utilidad de sus habilidades, Mimu usa el micrófono dorado para cantar y regresa a todos a la normalidad. Oficialmente incorporada como idol bajo la supervisión de Yuri, esta le pregunta que cual es el sentido que tiene para ella ser ídolo y con esto confiesa su propio moto, es un Sueño.

Fin! Spoilers!

Ser ídolo no dura para siempre

Desde el punto de vista técnico, Idol Project debería ser una parodia, los elementos básicos de la comedia ridícula se encuentran presentes en toda la obra. No son pervasivos ni tímidos, con competencias en botes banana, caídas sensuales al agua, peleas mojadas y otros detalles de fanservice difícil de dejar pasar a la vista. Todos los accidentes que Mimu sufre para encontrarse con las demás ídolos son forzados en el mejor de los casos, la línea de la trama parece una trocha tercermundista y la animación es más o menos barata. Esto se pasaría por alto si al menos la obra fuese graciosa, si la mitad de los chistes hiciera gracia o si algo tuviese sentido, pero como no lo tiene si no estabas inmiscuido en el ambiente seiyu de los noventa (con un ligero giro yuri entre las ídolos); entonces la parodia se perdió en el tiempo y la obra quedó como un referente más de que aún en sus “mejores días” el 90% del anime era basura.
Con el cambio de milenio, todas las jóvenes voces que participaron en dicho proyecto se fueron diluyendo en el ambiente seiyu y de la canción como muchas otras ídolos a las cuales trataron de representar y ridiculizar. Sólo Kikuko Inoue (Corvette) logró sobrevivir en el tiempo como una seiyu que hizo la transición de “la vecina de al lado” a la “madre amorosa” durante su carrera (pasando por personajes más sensuales). Esto por supuesto es una clara advertencia del futuro de los ídolos y lo efímero de su éxito en un momento determinado de la historia. Después de todo, cuando algo es prefabricado no se puede esperar que dure mucho, ¿o si?